Después de pasar diez años en la corte de Castilla y en el
ejercicio de las armas, Ignacio cae herido en la pierna derecha por una bala de
cañón. Inmovilizado en la casa torre de Loyola, no encuentra otra lectura que
la vida de Cristo y los santos; conmovido por estas lecturas, se convierte. Una
vez restablecido, decide partir como peregrino. Se confiesa, permanece tres días
en oración a la manera de los caballeros andantes, deja sus armas a los pies de
la “Moreneta” de Montserrat y sus ricos ropajes a un mendigo; se reviste con
una túnica y se pone en camino, en febrero de 1522. Llega primero a Roma, donde
recibe la bendición del papa Adriano VI; después a Jerusalén, donde solo se le permite
pasar tres semanas. Tras estudiar en Barcelona, Alcalá, Salamanca y París, funda
en Roma la Compañía de Jesús.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si quieres comentar no tengas inconveniente. Solo te ruego que seas educado y no uses nunca palabras soeces ni injuriosas. En caso contrario tendría que anularlo a continuación. Muy agradecido.