San Pablo recordaba a los cristianos de Éfeso que Jesús había dicho: «La felicidad está más en dar que en recibir». Sin duda él mismo sentía gran alegría en llevar el mensaje de salvación por pueblos y ciudades a toda clase de personas. Y es la vivencia que tú puedes experimentar cuando por amor te dones a los demás en gestos de servicio humilde.
Un anciano muy pobre se dedicaba a sembrar árboles de mango. Alguien le dijo: ”¿Cómo es que a su edad se dedica a plantar mangos? ¡Tenga por seguro que no vivirá lo suficiente para consumir sus frutos!” El anciano respondió apaciblemente: “Toda mi vida he comido mangos de árboles sembrados por otros. ¡Que los míos rindan frutos para quienes me sobrevivan! Habitamos un universo espléndido en el que todo y todos tienen algo que ofrecer. Los árboles dan, los ríos dan, la tierra da, el sol y la luna y las estrellas dan. ¿De dónde, pues, esa ansiedad por tomar, recibir, amasar, juntar, acumular, sin dar nada a cambio? Todos podemos dar algo, por pobres que seamos. Podemos ofrecer pensamientos agradables, dulces palabras, sonrisas radiantes, conmovedoras canciones…
¡Qué hermosa lección! “Todos podemos dar algo por pobre que seamos”. Esto será para otros motivo de alegría y felicidad, pero sobre todo para ti será una fuente de satisfacción y dicha profunda, porque nada plenifica tanto al hombre como sus gestos de amor gratuito. Es mi deseo que experimentes hoy la felicidad de dar.
Padre Natalio
Dale gracias a Dios, que te da alegría por un lado y que por el otro, puede querer que hagas penitencia por todo el que haga una visita por estos lares.
ResponderEliminarYa lo sabes. El Señor te da un dedalito de miel...y te lo cobra bien por ahora, para que sigas siendo fiel... y...ya quisiera estar a tu altura en el Reino. Y te digo esto porque ... como hoy-ahora- ya es CRISTO REY, ya lo habrás empezado a celebrar, si has ido a Misa hoy por la tarde, en las Vísperas.
Que el Señor reine siempre en nuestras almas y que cada día crezcamos en amor y servicio a tal Señor. Y de esta manera, desde estos lares, navegando por el espacio, lancemos rayos de amor de Dios a todos aquellos que conecten... porque "o sol xa saiu"!!!, y la Madre mía nunca nos fallará. F.J.