EL PURGATORIO NO ES UN LUGAR,
SINO
“FUEGO DE AMOR”,
DICE EL PAPA
S. S. BENEDICTO XVI dedica su catequesis a santa Catalina de Génova
CIUDAD
DEL VATICANO, miércoles 12 de enero de 2011 (ZENIT.org).- El purgatorio
no es tanto un “espacio” donde se purifican las almas, sino un “fuego
interior” que purifica a la persona y la hace capaz de contemplar a
Dios, afirmó hoy Benedicto XVI, durante la Audiencia General.
Como
es habitual en los últimos meses, el Papa quiso dedicar su catequesis
de hoy, dentro de la Audiencia General celebrada el Aula Pablo VI, a una
mujer, santa Catalina de Génova, conocida sobre todo por sus
reflexiones
sobre la naturaleza del purgatorio.
Esta
mujer italiana, que vivió en el siglo XVI, tuvo una fuerte experiencia
interior de conversión que la llevó a renegar de la vida mundana que
había llevado hasta entonces, dedicándose desde entonces al cuidado de
los enfermos, hasta su muerte.
Catalina tuvo una serie de revelaciones místicas, que consignó en su Tratado sobre el purgatorio y el Diálogo
entre el alma y el cuerpo.
Aunque
nunca tuvo revelaciones particulares sobre el purgatorio, explicó el
Papa, “ en los escritos inspirados por nuestra Santa es un elemento
central, y la manera de describirlo tiene características originales
respecto a su época”.
La
santa describe el purgatorio no tanto como un “lugar”, como era
habitual en su época: “no está presentado como un elemento del paisaje
de las entrañas de la tierra:
Un cuadro piadoso del Purgatorio con la
Santísima Trinidad y la intercesión de La Santísima Virgen.
es un fuego no exterior, sino interior”.
“Esto es el purgatorio, un fuego interior”, subrayó el Papa.
La
Santa, en sus escritos, “habla del camino de purificación del alma
hacia la comunión plena con Dios, partiendo de su propia experiencia de
profundo dolor por los pecados cometidos, en contraste con el infinito
amor de Dios”.
Cuando
Catalina, en el momento de su conversión, “siente de repente la bondad
de Dios, la distancia infinita de su propia vida de esta bondad y un
fuego abrasador dentro de ella. Y este es el fuego que purifica, es el
fuego interior del purgatorio”.
Otra
de las características de Catalina es que “no parte del más allá para
narrar los tormentos del purgatorio – como era habitual en ese tiempo y
quizás también hoy – y después indicar el camino para la purificación o
la conversión”.
Al contrario, “parte de la experiencia propia interior de su vida en camino hacia la eternidad”.
“Catalina afirma que Dios es tan puro y santo que el alma con las manchas del pecado no puede encontrarse
en presencia de la divina majestad”.
Si quieres puedes seguir leyendo este artículo que D. Javier ha publicado en el blog de la parroquia de Santa María de Baiona, con el que tanto aprendemos:
No te olvides de que DIOS,
"que te creó sin ti, no te salvará sin ti"
Y si tienes devoción
a NUESTRA SEÑORA
LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA,
MADRE DE DIOS Y MADRE NUESTRA,
será un signo de predestinación,
como lo han dicho muchos santos.
Ánimo pues,
y a no cesar en la lucha diaria.
Que Dios y Santa María
vengan en nuestro auxilio.
Amén.
Franja.
Si quieres leer "La Recompensa de los Justos", un artículo creado por D. Javier y con un numeroso número de visitas debido al gran interés que despierta y al gran camino que enseña, entra en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si quieres comentar no tengas inconveniente. Solo te ruego que seas educado y no uses nunca palabras soeces ni injuriosas. En caso contrario tendría que anularlo a continuación. Muy agradecido.