Sí se puede, cuando estás decidido,
cuando comprometes tu voluntad
para lograr lo que deseas alcanzar.
Sí se puede, cuando ante cada obstáculo
Sí se puede, cuando ante cada obstáculo
muestras temple y con mayor decisión
los empiezas a enfrentar.
Sí se puede, si ante cada fracaso buscas
Sí se puede, si ante cada fracaso buscas
reconocer tus propios errores, lo que te permitirá
acumular sabiduría y todos tus sueños realizar.
Sí se puede, si ante los conflictos mantienes
Sí se puede, si ante los conflictos mantienes
una actitud positiva y, a pesar de las adversidades,
tu ánimo no comienza a menguar, así,
no habrá cima que no puedas alcanzar.
Sí se puede, cuando ante los negativos
Sí se puede, cuando ante los negativos
y escépticos mantienes una sonrisa
y la alegría se convierte en tu fiel compañera...
siempre amigos podrás cautivar.
Sí se puede, cuando ante la duda
Sí se puede, cuando ante la duda
y la incertidumbre, tu fe te mantiene firme.
Sí se puede, si tienes el coraje de vivir
Sí se puede, si tienes el coraje de vivir
intensamente y haces de cada día,
una fascinante aventura...
La muerte, entonces, será una angustia
que nunca llegará.
Sí se puede, cuando aprendes a confiar
Sí se puede, cuando aprendes a confiar
en Dios, dejándole a Él los imposibles
y entregas tu vida entera a las estrellas
por las que quieres luchar...
podrás entonces el camino a la plenitud alcanzar...
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