Concha, catequista de la parroquia Santa María de Baredo, ha escrito esta hermosa poesía dedicada a Nuestra Madre la Virgen de la Cela. ¡Enhorabuena! ¡Es realmente preciosa! En ella se refleja el amor que Concha siente hacia Nuestra Virgen y que transmite cada domingo en la catequesis a sus chicos.
Madre, este domingo es muy especial
porque eres la Madre más grande del cielo y de la Tierra.
Madre, somos tus hijos
y te queremos.
¡No nos olvides nunca!
¡Qué bonita eres!
Madre Salvadora,
que proteges a todos tus hijos,
a los caminantes, a los navegantes
y a todos los marineros
con la Luz de tus Ojos.
Madre, protege a todas las madres de la Tierra,
ya que eres el Camino
para encontrar a Jesús.
Madre, Tú eres la Reina del cielo,
la que más amas,
la que nos quieres.
Si nosotros te olvidamos,
¡Tú no nos olvides!
Madre hermosa,
que nos llevas de tu mano,
guía por el sendero a los jóvenes,
y que oigan la voz de las vocaciones sacerdotales.
Madre, gracias por cuidarnos,
por salvarnos de los peligros,
por curar nuestros males,
y por perdonar nuestras culpas.
¡Gracias, María, eres la Madre de todo lo creado!
Concepción Álvarez
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